La curva de la escolástica Dentro de la filosofía escolástica se suelen distinguir cuatro períodos: a)     Período de transición, que abarca desde fines de la filosofía patrística hasta el siglo IX. Se halla representado por filósofos de la talla de Boecio, Casiodoro, San Isidoro y Beda el Venerable. b)     Período de formación. Se inicia en el siglo XI y se extiende hasta finales del siglo XII. Durante este período distinguimos dos o tres corrientes de pensamiento escolástico: judía, árabe y cristiana. Las dos primeras influyen decisivamente en la esco lástica cristiana, propiciando la transmisión del pensamiento clásico —Platón, Aristóteles— y apor tando su propia especulación, sobre todo a través de autores como Avicena, Maimónides y Averroes, etc. Durante este período, además de la escolástica árabe y judía, está presente la influencia de San Agustín y el Pseudo Dionisio. Aristóteles y Platón se van introduciendo lentamente, por medio de tra ducciones parciales. c)     Período de apogeo. Comprende el siglo XIII. Es la época de la fundación de las universidades como canalizadoras del pensamiento. Aparecen dentro del campo cristiano las diversas escuelas cla ramente definidas. Ello se debe, sobre todo, a la irrupción de los mendicantes en la enseñanza. Apa recen los franciscanos y dominicos con figuras de primera talla. Los franciscanos asumen fundamen talmente el pensamiento platónico-agustiniano. Sus figuras principales son Alejandro de Hales (11801245) y San Buenaventura (1221-1274). Dentro de esta misma línea franciscana, debemos considerar en esta misma época a Juan Peckaam y Enrique de Gante, que enlazan con el período posterior. Y dentro de este mismo período no podemos menos de señalar la figura señera de Duns Scoto (12701308), franciscano llamado el Doctor sutil, por su agudeza y penetración. Para ser completos, recor demos la figura del español Raimundo Lulio (12351315), con marcadas diferencias dentro de la escuela franciscana. La corriente aristotélico-escolástica o simplemente tomista es obra predominantemente dominicana. Sus principales representantes son San Alberto Magno (1206-1280) y Santo Tomás de Aquino (1224-1274), de los cuales hemos hablado en esta historia. Ya hemos visto lo que supuso la traducción completa y la adopción de las obras de Aristóteles. Remitimos a las páginas de esta historia donde hablamos de la opción de Santo Tomás por Aristóteles y de lo que esto supuso para su vida y para el pensamiento cristiano. Indiquemos brevemente otro de los aspectos de la escolástica en este período: el llamado averroísmo latino. Aparece como intérprete de Aristóteles a través de Averroes. Su principal representante será Siger de Bravante (1235-1282) a quien hemos visto como oponente de Santo Tomás en la Universidad de París. Los límites de espacio no nos permiten extendernos en otros autores y escuelas dentro de este período de apogeo de la Escolástica. Mencionaremos solamente la Escuela de Oxford que tanta importancia tendrá en el desarrollo de la filosofía moderna con su método experimental. Sus representantes más importantes son Roberto Grosseteste (1175-1253) y Rogerio Bacon (1210-1292). d) Período de decadencia. Se extiende desde el siglo XIV hasta la aparente disolución de la escolástica en la época renacentista. Se caracteriza por el despegue del realismo tomista hasta el nominalismo y misticismo. Su principal representante es el inglés Guillermo de Ockham (1300-1350) en la corriente nominalista, y los maestros Eckart, Taulero y Suso en el misticismo.