Insolación: 11

19/05/2024 2.514 Palabras

Capítulo XI 11 Pág. 11 de 22 Insolación Emilia Pardo Bazán Lo bueno fue que la dama, lejos de sorprenderse, saludó a Pacheco como si el encontrarle allí a tales horas le pareciese la cosa más natural del mundo, y, recíprocamente, Pacheco empleó también con ella todas las fórmulas de cortesía acostumbradas cuando un caballero se encuentra a una señora de cumplido, respetable, ya que no por sus años, por su carácter y condición. Se hizo atrás para dejarla pasar, y al seguirla al saloncito de confianza, donde ardía sobre la mesa de tijera la gran lámpara con pantalla rosa velada de encaje, se quedó próximo a la puerta y en pie, como el que espera una orden de despedida. -Siéntese usted, Pacheco... -tartamudeó la señora, bastante aturrullada aún. El gaditano no se sentó, pero adelantó despacio, como receloso; parecía, por su continente, algún hombre poco avezado a sociedad: pero este aspecto, que Asís atribuyó a hipocresía refinada,...

This website uses its own and third-party cookies in order to obtain statistical information based on the navigation data of our visitors. If you continue browsing, the acceptance of its use will be assumed, and in case of not accepting its installation you should visit the information section, where we explain how to remove or deny them.
OK | More info